Diseño conceptual del interior de la Prisión de los Malditos.
La Prisión de los Malditos está construida en el propio cuerpo de Egeón el Hecatónquiro y es gobernada por las temidas Furias. Es el lugar donde son enviados todos aquellos que son condenados por sus actos asociados principalmente con el cargo de Traición a los Dioses del Olimpo, donde permanecerán presos mientras son castigados eternamente por sus acciones.
Kratos recorre el interior y el exterior de la Prisión de los Malditos en los capítulos 1, 2, 4, 16 y 17 de God of War: Ascension.
En la saga God of War[]
Rise of the Warrior[]
El guerrero despierta encadenado en la Prisión de los Malditos sin recuerdo alguno, allí The Giver le ayuda a recordar que está en ese lugar por romper el juramento que le hizo a su padre momentos antes de morir: evitar que su familia sufriera algún daño. Al haber envenenado a su tío por venganza, el guerrero es condenado a permanecer toda su vida en esa prisión mientras sufre el castigo de las Furias. Finalmente The Giver le revela su identidad, se trata de Orkos, el guardián de su juramento.
God of War: Ascension[]
Kratos encadenado en la Prisión de los Malditos.
Kratos se encuentra encadenado en la Prisión de los Malditos. Allí es torturado por la furia Megera, hasta que el espartano logra romper las cadenas que le mantienen preso.
Desde ese momento Kratos hace todo lo posible para escapar de la gran prisión, la cual ha cobrado vida por medio de los parásitos de Megera. Debe enfrentarse a diversas criaturas y al propio Egeón el Hecatónquiro, donde está construida la prisión. También debe enfrentarse a las furias Alecto y Tisífone, quienes intentan confundir al espartano por medio de ilusiones.
Finalmente, con la ayuda de Orkos, consigue destruir a las tres Furias, escapar de la Prisión de los Malditos y regresar a su hogar, donde le espera la peor de las revelaciones.
